Conducimos el Mercedes Benz AMG GT 63 S del 2020, un coupé de 4 puertas de lujo.
Desarrollado integralmente por AMG y fabricado de Sindelfingen en Alemania.
Su techo en ángulo agudo, un capó largo y ruedas grandes le otorgan una imagen imponente, mientras que en el interior combina tecnología con lujo.
El motor es un AMG V8 biturbo de 4,0 litros, armado artesanalmente y firmado por el técnico que intervino.
Desarrolla una potencia de 630 caballos de fuerza y 664 libras pie de torque acoplado a una transmisión automática AMG de 9 marchas.
Llega a una velocidad máxima 191 millas por hora y va de 0 a 60 millas en 3,1 segundos
Viene con con 6 modos de manejo: Resbaladizo, Comfort, Sport, Sport+, RACE e Individual.
En el interior, el tapizado es de cuero color blanco, trae una doble pantalla que incluye el panel de instrumentos 100% digital de 12,3 pulgadas junto a la pantalla de infoentretenimiento también de 12.3 pulgadas y la iluminación ambiental multicolor es muy agradable.
Para destacar, el sistema de sonido Burmester con 23 parlantes y el relajante sistema Energizing Comfort de Mercedes Benz que ajusta el control de clima, la iluminación ambiental y los calentadores y masajeadores de los asientos en una variedad de programas.
Los asientos traseros pueden plegarse y se encuentran junto una pantalla táctil para los sistemas de información y clima.
En cuanto al aspecto exterior vemos las nuevas luces delanteras con faros LED High Performance, la parrilla delantera con diseño AMG, grandes tomas de aire y llaman mucho la atención las llantas sólidas de 21 pulgadas AMG.
Rendimiento: Ciudad 15 MPG, Carretera 20 MPG y Combinada 17 MPG.
Mercedes Benz AMG GT 63 S del 2020, un sedán estilo coupé.
Producción: Luis Fernández
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